ANDARRIOS. TODO UN RETO

Hace ahora cinco años y medio, cinco personas de JARA nos embarcamos en un proyecto que, a través de una asociación medioambiental, patrocinaba la Junta de Andalucía.

Se trataba de ANDARRÍOS, un programa de voluntariado, que pretendía analizar, más o menos exhaustivamente,  los ríos y riberas de Andalucía.

Asistimos a dos o tres reuniones, donde recibimos una pequeña información sobre los métodos que habría que seguir, y donde finalmente se nos puso encima de la mesa un acta de compromiso por cinco años.

No tuvimos que pensar mucho; nos gusta el campo, y nos gustaba la idea… elegimos una rivera zalameña, seleccionamos un tramo, y, en Abril de 2007 empezamos con nuestro trabajo de voluntarios.

Y el trabajo no ha sido cansino, pero sí exigente: se trataba de evaluar,  de forma metódica, la calidad medioambiental  de las aguas, y del entorno de la rivera. Para ello, había que tomar parámetros físicos, químicos, de flora, fauna, etc.  Y todo ello en fines de semana, y en los mismos días de cada mes y cada año, para que no hubiera diferencias externas  en las mediciones.

Durante este tiempo, hemos conocido plantas que no sabíamos que existían en nuestro entorno, hemos aprendido a reconocer huellas de animales, hemos visto bichos acuáticos alucinantes… hemos pasado buenos ratos…

Ahora, en Junio-2011, hemos mandado nuestro último informe; hemos cumplido el compromiso que firmamos hace cinco años. Las personas que han hecho posible este programa de voluntariado son: Juanma, Luisa, Javier,  J. Centeno, Merchi, Isabel, Luz de Luna, Domingo,  Imma Zorrero, Ana Chaparro, María Zarza, Andrea Borque, Andrea García, Manuel Gómez.

¿Conclusiones?  La experiencia ha merecido la pena, ha sido positiva, sobre todo a nivel personal y asociativo. Pero, como ya le hemos trasladado a La Junta de Andalucía en alguno de nuestros informes, no basta con nuestra implicación, echamos de menos la actuación de la Administración en la recuperación, tanto de la calidad del agua, como de los espacios degradados alrededor de ríos y riveras;  no nos pueden comprometer a que actuemos nosotros y quedarse ellos de brazos cruzados; el campo necesita más implicación, sobre todo por parte suya.

Manuel Gómez Muñiz

Coordinador Andarríos Cistus-JARA

Junio-2011